No me gustan los blogs
(porque no los puedo oler),
no me gusta decorarlos,
dedicarles tiempo,
diseñarlos para que atraigan...
Sólo me gusta escribir
y descubrirme mañana
en las profundidades de lo que fui.
Murió de secretismo
Tú lanzaste la moneda -alguien tenía que hacerlo- y cayó por el lado de la soledad. Ahora la guardo yo. Fue tu regalo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario